Una de las principales dudas que tenemos en un divorcio es por qué motivos te pueden quitar un hijo. Para saberlo, es importante analizar diferentes cuestiones relacionadas con la custodia de los hijos.
Indice de Contenido
- ¿Conoces la diferencia entre custodia y potestad de un hijo?
- Requisitos para la custodia de un hijo
- Por qué motivos puedes perder la custodia de tus hijos
- Recuperación de la custodia de tus hijos
¿Conoces la diferencia entre custodia y potestad de un hijo?
Cuando hablamos de patria potestad hacemos referencia a los derechos y deberes que tienen los padres en relación con sus hijos menores de edad. Comprende su cuidado, compañía, alimento y educación. La patria potestad tiene las siguientes características:
- Obligatoria, personal e intransferible.
- Indisponible. No puede ser modificado o extinguido por voluntad propia.
- De ambos progenitores.
La patria potestad se extingue por la muerte de los padres o el hijo o cuando este cumple la mayoría de edad o se emancipa. También uno o ambos progenitores pueden ser privados de la patria potestad por incumplimiento o causa criminal o matrimonial.
Por el contrario, la custodia es el cuidado cotidiano de los menores. Es decir, se entiende como la convivencia, el cuidado y la asistencia diarios. La custodia puede atribuirse a ambos progenitores, uno de ellos o una tercera persona.
Por tanto, la diferencia entre potestad y custodia de hijos es que la primera se refiere a la representación de los mismos y la segunda a la convivencia con ellos. Por ello, en una separación, la custodia de los hijos puede ser compartida o de uno de los progenitores mientras que la patria potestad se mantiene para ambos padres.
Requisitos para la custodia de un hijo
La mayoría de los padres tienen como prioridad la custodia de los hijos en un divorcio. Para conseguirlo se deben de cumplir los siguientes requisitos:
- Tener tiempo suficiente. Hay que demostrar poder dedicar a diario el tiempo necesario para sus rutinas.
- Acuerdo. La custodia de mutuo acuerdo es más beneficiosa para todos.
- Implicación. Demostración del cariño por el hijo así como implicación cuantitativa y cualitativa.
- Solicitud legal. Enviarle al juez la demanda de guarda y custodia de común acuerdo o recurrir a la vía contenciosa, en caso de no llegar a acuerdo.
- Abogado. En todo caso es necesario el asesoramiento, pero aún más si los padres no tienen buena relación.
- Pruebas y testigos. Para la decisión final es fundamental acreditar que se es la mejor opción para el menor.
- Informe psicológico. Aunque no es vinculante, suele ser determinante contar con un informe psicológico favorable.
Por qué motivos puedes perder la custodia de tus hijos
Saber por qué motivos te pueden quitar un hijo puede ayudarte a evitarlos y así conseguir la custodia de los hijos en el divorcio, ya que perderla suele ser una de las situaciones más difíciles a las que se enfrenta un padre o madre. Los principales motivos de la pérdida de custodia son:
- Vida inestable. Un estilo de vida desorganizado puede afectar a la estabilidad del menor, aun cuando sea la nueva pareja del progenitor quien lo haga.
- Desatender al hijo. Deben cubrirse de forma efectiva todas las necesidades diarias del menor.
- Cambio de residencia. En caso de que este cambio afecte al desarrollo del hijo por generar inestabilidad en su entorno debido a un cambio radical de vida.
- Alienación. La manipulación del menor en contra del otro progenitor con el objetivo de destruir su relación.
- Violencia. La utilización de la violencia con los hijos o los antecedentes por esta causa.
- Adicciones. El consumo habitual de drogas o alcohol que afecte al cuidado y estabilidad del menor.
- Prisión. El ingreso en un centro penitenciario por la comisión de un delito.
Recuperación de la custodia de tus hijos
Aunque la pérdida de la custodia de los hijos pueda parecer algo definitivo, puede no serlo. En el caso de que el motivo por el cual se perdió la custodia haya desaparecido, es decir, nuestra situación haya cambiado, puede comunicarse al juzgado para que inicie el trámite de estudio de la custodia nuevamente. Así, podremos probar que la forma de vida ha cambiado y que, por ejemplo, ya no es inestable o que las adicciones han desaparecido.
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